Tras el primer paso dado sobre los medicamentos vino la etapa de los precursores químicos, “lo cual también nos da tranquilidad a partir de nuestra alianza con el Sedronar (Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico). Ahora seguimos avanzando con la trazabilidad de los agroquímicos y productos veterinarios conjuntamente con el SENASA, lo cual nos relaciona con la sanidad y la ciudadanía completa”, continuó exponiendo El Dr. Di Cesare.


 

La prescripción electrónica apunta a la reducción de los errores que se producen con las prescripciones manuales.

“Las complicaciones que produce un tratamiento equivocado aumenta la mortalidad en un 1.88 de casos. La complicación asociada a medicamentos casi duplica la causa de muerte en un paciente. El error se produce en un 56% en el momento de la prescripción. La receta electrónica puede evitar este error porque establece si el medicamento tiene interacción con otros medicamentos que está recibiendo el paciente, y si es exactamente el que hay que prescribir. El 34% de los errores se produce en el momento de la lectura de la administración. Si leo mal lo que prescribo es posible que administre mal.

Posteriormente el 6% se debe a la transcripción de la prescripción de un médico que puede leerse mal. El 4% de los errores se produce en la dispensa. Sólo el PAMI tiene una docena de millones de productos dispensados por mes, unas 144.000.000 de unidades al año, por lo cual todos estos errores pueden ser miles de pacientes pasibles de errores”, sostuvo el Dr. Di Cesare.

En este tipo de proyectos de cambio al comienzo todo lo que va a cambiar nos eriza e intentamos que nada nos hiera. Como seres inteligentes, ante la eventualidad de un cambio es necesario que utilicemos nuestra “inteligencia de grupo” por respeto a los pacientes, por respeto y deber de seguridad, y para que todo el sector evolucione. Hay que aceptar el cambio y la tecnología, hay que aceptar los nuevos estándares”, concluyó el Director del PAMI.


   

Justamente, el Sistema Nacional de Trazabilidad de Precursores Químicos es una aplicación online que registra todas las transacciones realizadas en la Argentina con tales precursores, permitiendo una visibilidad total y un avance hacia un control en tiempo real de sus movimientos con fiscalización a nivel nacional. 

Un próximo paso sobre el que se está trabajando es la prescripción electrónica de medicamentos que cerraría un ciclo hacia la seguridad. “Desde 2011 en Pami estamos utilizando la prescripción electrónica de medicamentos y premiamos a los médicos que también la implementan”, aseguró el Dr. Di Cesare.