La comercialización

La importancia de la comercialización del arándano para nuestro país tiene más carácter futuro que pasado ya que comenzó hace muy poco, y para quienes se interesan por nuevos emprendimientos es oportuno destacar que los meses de la cosecha coinciden con los de mayor demanda de los países del hemisferio norte, en los cuales se llegan a pagar precios elevados por coincidir con su invierno y en consecuencia con el desabastecimiento local.

Hablar de comercialización implica referirse ante todo a dos puntos clave:

Formas de consumo
Inversión

Formas de consumo: además del consumo como fruta fresca, el arándano se utiliza para la fabricación de dulces, jaleas, jugos y salsas. Cada una de las formas de comercialización requiere obviamente una atención especial de envasado y conservación, pero es la fruta fresca la que se presenta como más vulnerable dado que es un producto altamente perecedero que debe mantenerse con una adecuada cadena de frío post-cosecha.


 

 

 

Si bien la cosecha del arándano permite la posibilidad de que se realice manual o mecánicamente, el problema deviene de que después de su punto óptimo de maduración cae muy rápidamente en el de sobre-madurez, con pérdida de sabor y color. La razón fundamental de este fenómeno es su característica de fruto de frío, condición que requiere particularmente cuando está fuera de la planta.

Otro problema que puede presentarse post-cosecha del arándano es el desarrollo de alguna enfermedad cuando se interrumpe la cadena de frío y se lo expone a una excesiva humedad.

Si pensamos en que el arándano se comercializa con países del hemisferio norte y que su transporte demanda muchas horas, es fácil comprender que este fruto necesita de la ayuda de técnicos especializados y de un tratamiento propio y cuidadoso de enfriado.

Inversión: la inversión necesaria para un emprendimiento dedicado al arándano puede decirse que es alta ya que además de contarse con una cantidad