Comité correspondiente y también con cada una de las empresas en particular; así quedó planteado el tema entre los empresarios del sector.

Una recomendación (siempre con base en los estándares globales y en las medidas que se han aplicado en otras partes del mundo con respecto a esta problemática), acerca de los procesos que se deberían implementar y de los puntos de control necesarios para lograr una correcta alineación de datos, recomendación que servirá de guía tanto para las empresas que ya están trabajando en el tema como para aquellas que recién están comenzando a hacerlo.

Un documento conteniendo los roles y responsabilidades que las empresas deberán asumir para lograr una correcta alineación de datos. Podrán suscribirse voluntariamente todas aquellas empresas que estén trabajando en el tema o deseen hacerlo, y las que deseen además formalizar su compromiso con la iniciativa.

Un proceso de auditoría que tiene como objetivo verificar la consistencia de los datos de los productos y el cumplimiento de las condiciones necesarias para una correcta alineación de datos en los procesos y las interfases utilizadas por las empresas. Dicho proceso será realizado en aquellas empresas que voluntariamente hayan adherido a la iniciativa suscribiéndose al documento mencionado en el punto anterior.

La iniciativa de encarar estas acciones nació en el momento en que un grupo de usuarios comenzó a darle mayor importancia a la alineación de datos generando un cambio de actitud que se vio reflejado por la expresa ratificación de las voluntades por avanzar en el tema.


 



 

 








Los números que pudieron redondearse hasta el momento son más que consistentes: se encontró, por ejemplo, que el 50% de los datos de las cajas y/o bultos continentes tenía alguna diferencia entre lo ingresado en DATA.COD y la carga en los maestros de las cadenas. Esta situación puso de manifiesto que las cadenas habían actualizado la información por otra vía mientras que los datos de DATA.COD no eran correctos. Para corroborar esto, se cruzaron los datos de los maestros de las cadenas con un relevamiento físico y se encontraron diferencias de datos del orden del 47% (ver figura 1). También se encontraron diferencias entre los maestros enviados por los proveedores y el Catálogo Electrónico DATA.COD.


Otros resultados alcanzados con las acciones encaradas por GS1 Argentina, fueron que un 12% de los productos que se están comercializando en las cadenas no ha sido inscripto en nuestra entidad y que un 9% está dado de baja (ver figura 2). Este punto es verdaderamente crítico ya que se puede generar la duplicación de códigos, la utilización de códigos pertenecientes a otras empresas, y un sinnúmero de problemas que terminaría debilitando el sistema y tiraría por tierra todos los beneficios obtenidos hasta hoy.


 

 

     

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