La inocuidad alimentaria
no es negociable



 

La comprobación de que los procesos que exigen las regulaciones no sólo deben efectivizarse sino también demostrarse y validarse, es tal vez más importante que la información en sí misma. Y es además, la base de la credibilidad y la confianza.

Las nuevas tecnologías en alimentos y la sobreoferta de información que ofrecen los medios electrónicos condicionan cada vez más a los consumidores y por ende, a  los mercados globales.
Por su parte, los organismos de contralor de los países, cada vez  más buscan regular la inocuidad que ya no tiene que ver con la calidad alimentaria, sino con la seguridad y la capacidad de demostrar la veracidad de los procesos productivos que se expresan muy bien en la información, pero que sin un seguimiento desde el origen, no tiene validez posible.

La inocuidad es hoy clave para la competitividad y la permanencia de las empresas a largo plazo. Y a esto se suma la demanda  de producir  alimentos  “naturales”, poco procesados y con la menor cantidad de aditivos sintéticos. Por supuesto, todo, teniendo en cuenta el cuidado del medio ambiente:  menor contaminación con un uso eficiente de recursos.

 

Al mismo tiempo,  las políticas sanitarias de los alimentos de origen animal y vegetal se ven influidas cada vez más  por un complejo de políticas de estado. En el caso del mercado de carnes, las  medidas de sanidad animal están cada vez más informatizadas, y contar con tecnología electrónica facilita el comercio internacional seguro. Los casos más recientes tales como el escándalo de la carne de caballo en Europa pusieron de relieve la necesidad de colaboración entre los organismos mundiales para mejorar la seguridad de las cadenas de suministro de carne y subproductos.

Este complejo entorno  exige cubrir todas estas condiciones, y por supuesto no perder una adecuada relación costo-beneficio que permita mantener la competitividad de las empresas.

Para quienes están relacionados con la industria de alimentos, y particularmente para quienes son responsables de dirigir y preparar a sus empresas para el futuro, es clave conocer hoy las perspectivas de inocuidad alimentaria de los próximos años. A continuación se mencionan algunas de las más relevantes. Y sin asustar, existen más ítems de los que mencionaremos en esta nota: