La librería Argot comparte los datos de lectura con la compañía que publicó los libros etiquetados."Los editores analizan el éxito, y son capaces de reaccionar de inmediato", afirma Bonet. "Si un libro no genera datos (indicando que los compradores lo están recogiendo], algo está pasando con él."Para los editores, dice, la solución puede ser cambiar la cubierta, mientras que el sistema también les permite aumentar la producción de libros basándose en el interés que generan. Los gerentes de Argot también pueden utilizar los datos para determinar si el entorno o la ubicación del libro está afectando su interés”, dice Bonet. 

Según Bonet, Argot ha probado la solución NFC de Cité Trade Tech."En este momento, no usamos la NFC en la librería", dice, aunque añade que el minorista puede optar por usar la tecnología para ofrecer a los clientes (dueños de teléfonos NFC) más detalles acerca de un libro, así como las ofertas promocionales relacionadas con ese título. El uso de NFC necesitaría que cada categoría de producto esté provista de una etiqueta NFC, contra la que un consumidor puede apoyar su teléfono, pero no requeriría que una etiqueta NFC se coloque en cada producto. Si la tienda adopta la solución de la NFC, dice, es de esperar que la tecnología se utilice no sólo para proporcionar detalles adicionales para los compradores, sino también para permitir a los consumidores a acumular puntos de fidelidad con la compra de libros.

 

La tienda Hush Puppies, ubicada en el centro comercial Gran Turia de Valencia, también está utilizando el sistema de Smart Data ISF para obtener información sobre cómo los clientes manipulan los productos antes de la compra, comenta Daniel Mus, Gerente de logística y negocio de Hush Puppies de España. "Queríamos resolver la falta de información sobre los elementos que fueron más tomados o que más gustaban", explica Mus, y determinar lo que puede ser "los puntos calientes de venta en la tienda". Las etiquetas pasivas EPC Gen 2 UHF RFID se adjuntan a etiquetas colgantes de papel en 50 ó 60 pares de zapatos y botas que se muestran en uno de los tres estantes con RFID, uno por cada vidriera de la tienda. Con el sistema de ISF en el lugar, la empresa no sólo puede determinar qué artículos interesan a los clientes, sino también qué ubicaciones dentro de la tienda pueden atraer el mayor flujo de cliente. Es más, para los artículos más visitados la solución puede indicar con qué frecuencia esos modelos de zapatos fueron comprados. Desde que el sistema se instaló hace varios meses, dice Mus que la tienda ha sido capaz de optimizar y aumentar las ventas, cambiando la ubicación de los artículos y siguiendo su posicionamiento según la información suministrada por los estantes."

Por Claire Swedberg