Considerando la necesidad de optimizar los servicios al paciente y de garantizarle una atención sin riesgos, las últimas décadas han transcurrido en los países más desarrollados y en sus diferentes centros del cuidado de la salud, en medio de estudios, pilotos y debates tendientes a encontrar soluciones concretas y definitivas. 


El aporte de los Estándares GS1
Con treinta y cinco años cumplidos desde la primera lectura en Marsh Supermarket, USA, el código de barras ha llegado a implementarse poco a poco en diferentes sectores y a expandir su primera propiedad de servicio. Así, de ser el novedoso símbolo capaz de transportar el precio de un producto para agilizar el servicio de una línea de cajas, ha pasado a ser una herramienta de fundamental importancia a la hora de mantener actualizado el stock de un negocio, o de facilitar la toma de inventarios, o de dar forma a la documentación comercial electrónica, entre otras posibilidades.

En todo este tiempo el código de barras ha sabido demostrar holgadamente los beneficios que se obtienen a partir de la identificación de un producto o

 


 

 

 

 

 

 

 



 

servicio, de modo que la industria farmacéutica también un día se sumó a su implementación. Pero el sector de la salud y la ciencia al igual que el de la alimentación, como consecuencia de la globalización y de especulaciones inescrupulosas en numerosas oportunidades se ha visto alterado por hechos que causaron daños de distinta gravedad a los destinatarios finales de los productos.


La repercusión nacional e internacional que cada hecho produjo fue dando lugar a requerimientos cada vez más exigentes que derivaron por ejemplo en la necesidad de hacer trazabilidad de medicamentos e insumos médicos. Estas razones: identificación de productos, necesidad de seguridad y necesidad de estándares aplicables a nivel global, dio por resultado la organización de GS1 Healthcare, un grupo voluntario de usuarios del Cuidado de la Salud que incluye farmacéuticos, fabricantes de dispositivos médicos, distribuidores, entes gubernamentales y regulatorios, y asociaciones como la FDA de Estados Unidos, la Agencia de Salud Pública de Canadá y Eucomed.