Al observar estos números pensamos en lo grande y en cierto modo complicado, que debe ser administrar aspectos como las materias primas, la producción y los inventarios, en la industria, los proveedores, la entrega a clientes, etc.
  

 

 

alguna característica específica, y cuya aplicación correcta es fundamental para el buen funcionamiento o aún para la garantía de seguridad de quien tiene que utilizar el producto. Es muy probable que no haya errores humanos en una línea de producción o montaje de vehículos, ya que las industrias procuran incorporar profesionales altamente capacitados en el mercado. Pero los seres humanos son pasibles de errores y no se puede garantizar un 100% de perfección. Además, es posible que las piezas tengan defectos de fabricación y originen problemas en los productos antes o después de su utilización, situación que desencadena el famoso recall.
 
En un minorista de reposición de piezas, los errores de comercialización o de compras de un ítem no correcto, tal vez no sean tan raros. ¿Quién no fue a un comercio de autopartes a comprar algo para su vehículo y se engañó llevando otra cosa parecida, o una versión para un auto más nuevo? ¿La cubierta será la correcta para mi auto, modelo, año?

 
 
   
Desde el punto de vista de la gestión, las preguntas que surgen son: ¿cómo consiguen mantener la eficiencia las empresas de este sector, ante este crecimiento tan acelerado? ¿Tendrán errores de envíos, de recepción de pedidos? ¿Harán entregas de productos equivocados?

Imagine la cantidad de productos-piezas similares que se diferencian apenas por