La competencia como valor compartido*

Con la adhesión de productores y distribuidores del fast moving consumer goods, GS1 promueve el desarrollo y la implementación no sólo de estándares globales sino también de proyectos para mejorar la eficiencia y la eficacia de las empresas socias en las relaciones recíprocas con otros socios de la cadena de valor.

En un momento como el actual en el cual domina la globalización de los mercados, la competencia representa un conductor fundamental para un Sistema País que quiere crecer. El contexto en el cual operan las empresas del sector de alto consumo es muy competitivo ya sea internamente o en su relación con mercados externos. La eficiencia, la capacidad de innovación y los altos niveles de productividad son objetivos vitales que generan valor y se traducen en precios convenientes para los

 

 

consumidores, en productos de calidad y en servicios siempre mejores. Sin embargo, es importante que el proceso de liberalización de nuestro país se complete para que se traduzca en ventajas concretas para los ciudadanos y las empresas. Porque la competencia es un valor compartido y es necesario que sea reconocido y seguido por todos, que se convierta en un objetivo del sistema, del Sistema País, si queremos que incida positivamente en la competitividad de Italia sobre los mercados internacionales.

Un contexto competitivo es capaz de generar beneficios directos e indirectos para las empresas y para el consumidor final: es cuanto ha reconocido el 78% de los emprendedores y de los directivos de las empresas del gran consumo asociadas a Indicod, encuestadas en ocasión de la 5° edición del Observatorio Económico Indicod-ECR. Y es también el motor de la innovación.