Así como es difícil – o a veces imposible – determinar los límites que separan a la pequeña de la mediana empresa, y a esta de la gran empresa, así también es difícil sentenciar qué estrategia de marketing es la ideal. Sin embargo una planificación bien fundamentada puede oficiar de brújula y marcar el camino adecuado para no fracasar.

 
 

Hace no mucho tiempo un artículo de un matutino argentino hablaba del “verdadero secreto del Código Da Vinci”: el secreto, decía, había sido la técnica de marketing elegida para venderlo. Nadie puede dudar ya del éxito alcanzado por el famoso libro ni de la onda expansiva que provocó su salida al mercado. Se calcula que el Código Da Vinci ha vendido más de 60 millones de copias y para ello la inversión en la campaña inicial de marketing se basó sólo en la distribución de 10.000 ejemplares entre determinadas personas y en la publicidad “boca a boca”.

Por su parte, algunas cadenas minoristas con locales de ventas en todo el mundo y con volúmenes de facturación varias veces millonarios, después de analizar y observar que habían llegado a una etapa de estancamiento por saturación del piso del mercado al cual están dirigidas, comprendieron que tenían que emprender un nuevo rumbo, cauteloso, estudiado, pero firme, para no ver resquebrajarse la enorme estructura sobre la que se apoyan.

¿Cómo encarar una estrategia de marketing? ¿Puedo hacerlo yo, PyME? ¿Cómo influye la planificación en una campañade marketing? A estas y otras

  

preguntas nos respondió Carlos Pérez, Director de CP & Asociados, consultora especializada en marketing de PyMEs, quien también fue disertante de la tercera edición de la Jornada GS1 PyMEs 2007 realizada el pasado 7 de agosto en el Hotel Sheraton Libertador.

1 - ¿Existe un marketing para PyMEs y un marketing para grandes empresas?

Carlos Pérez: El objetivo final del marketing es evidenciar las bondades de un producto o servicio de modo tal que los posibles clientes puedan reconocerlo y evocarlo en el momento necesario, por lo tanto el objetivo final del marketing es el mismo para las PyMEs y para las empresas grandes. Lo que cambian son las formas y sin dudas, los recursos.

Hasta hace poco las empresas grandes llevaban ventaja pero con la llegada de la nueva economía, la globalización, y también con Internet, el mundo comenzó a achicarse, aparecieron nuevas tecnologías para las comunicaciones, las economías de escala comenzaron a dominar el mundo de los negocios y las PyMEs crearon nuevos y vastos imperios de comercialización. Las PyMEs hoy se han integrado a la cadena de valor

 
 

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