de la medida por parte del gobierno español, ante el compromiso argentino de mejorar el sistema de trazabilidad y de certificaciones de calidad.

Con el objetivo de hallar una solución a la necesidad de trazar productos alimenticios y garantizar así la seguridad al consumidor, un grupo de trabajo integrado por GS1, el EuroHandelsinstitute (EHI), la European Association of Fresh Produce Importers (CIMO), el Euro Retailer Produce Working Group (EUREP), la European Union of the Fruit and Vegetable Wholesale, Import and Export Trade (EUCOFEL) y la Southern Hemisphere Association of Fresh Fruit Exporters (SHAFE), ha desarrollado la Guía de Trazabilidad de Productos Frescos. La idea de trabajar con sistemas estándares se basó en que ante la diversidad de prácticas de las cadenas de abastecimiento de todo el mundo, es indispensable adoptar procedimientos comunes que faciliten a los productores, embaladores, importadores/exportadores y transportadores, el trabajo y el intercambio de información referidos a los productos que comercializan.

La utilización de la Guía de Trazabilidad es absolutamente voluntaria, pero permite a sus usuarios a través de la codificación en barras del sistema EAN.UCC para la identificación de frutas y verduras en sus unidades comerciales y logísticas, rastrear y trazar la totalidad de la producción con un máximo de velocidad y de precisión. Acortar tiempos y evitar errores en la transcripción manual de datos, se traduce a su vez en una reducción real de costos y en un eficiente manejo de negocios.

La trazabilidad como instrumento de control y defensa de la seguridad del consumidor es un requisito